El jueves 9 de Febrero llegamos a clase encantados con nuestras lupas. ¡Imanol iba a traer los terrarios para buscar, entre otras cosas, algún que otro bicho! Nos encanta hurgar en la tierra, y si el animal se deja le cogemos con mucho cuidado, pues sabemos que son importantes para nuestro huerto y tienen que volver después a su hábitat.
Pero Imanol nos dijo que había un cambio de planes: unas tiernas cebollitas nos estaban esperando en el huerto con urgencia, así que nos pusimos las botas...¡y a trabajar!!!
¡Qué divertido! Había que sujetarlas bien por el tallo, que tenía que quedar al aire. El próximo día pondremos el cartel en los bancales de guisantes y de cebollas.
Eso es trabajar y disfrutar. ¡Hurra!
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